Díaz Ordaz, Tamaulipas.- Entre un recrudecimiento de la violencia del crimen organizado, que incluso causó el pasado lunes un ataque a balazo de sicarios mexicanos contra agentes de la Patrulla Fronteriza de Estados Unidos, el Gobernador de Tamaulipas, Américo Villarreal, anunció ayer que renombrará a la «frontera chica».
El morenista aseguró ayer que la región se llamará ahora «frontera grande» al continuar ayer en el municipio de Díaz Ordaz un recorrido de cuatro días por la frontera de Tamaulipas con Texas.
«Ya vamos a cambiar todos este nombre», dijo Villarreal. «Ahora va a ser un decreto del Gobernador para decir que, a partir de ahora y a sugerencia de la Presidencia Municipal de aquí, Nataly (García), que ésta se va a llamar la ‘frontera grande’.
«Eso (el nombre) a veces nos condiciona a pensar de que no tenemos la importancia y el avance que debemos de tener en esta parte tan importante de nuestro territorio, tanto nacional como del Estado», añadió.
La «frontera chica» está integrada por Miguel Alemán, Díaz Ordaz, Mier, Camargo y Guerrero, cinco municipios fronterizos con Texas y limítrofes con Nuevo León, ubicados entre Reynosa y Nuevo Laredo.
La región es una de las más afectadas por la narcoguerra, donde se reportan constantes balaceras con «monstruos» -vehículos con blindaje artesanal- y más recientemente minas terrestres y drones con explosivos, situación que ya detonó un éxodo poblacional.
El pasado lunes, sicarios dispararon contra agentes de la Patrulla Fronteriza desde una ribera del Río Bravo a la altura del poblado de Los Guerra, en el municipio de Miguel Alemán, a lo que los oficiales estadounidenses respondieron a tiros, sin registrarse heridos o detenidos.