En platica casual con un empresario con residencia en la frontera tamaulipeca -por motivos obvios no identifico-, aunque anticipo fue un hombre de poco más de ochenta años de edad que, pese a su edad, vivió un secuestro de poco menos de 24 horas, pero no por ello menos estresante.
Todo empezó una mañana cuando junto a su esposa se trasladaba de su casa a la oficina de su pequeña empresa de importación y exportación. En una calle no muy transitada, intempestivamente cuatro hombres armados les dieron un cerrón vehicular para llevarse a su esposo, advirtiendo a la señora no denunciar a la policía y que en breve se comunicarían con ella.
Vía telefónica exigieron varios millones de pesos para rescatar al empresario, pero la señora buscó contacto con un vecino recién liberado del penal, con la seguridad de que le podía auxiliar, quien le escuchó, pero no se comprometió a nada.
Después de varias horas el vecino aseguró que ‘sus amigos’ no eran responsables del plagio, pero les iban a ayudar recomendando pagar el rescate exigido y así enterarse del lugar donde se rescataría al empresario.
El mismo vecino aseguró a la esposa, que los plagiarios eran de los mismos amigos del jefe, pero que “se habían despachado por su cuenta… a espaladas de su patrón”. Pagaron con su vida, porque los asesinaron en el momento de querer cobrar los miles de dólares exigidos.
Los hechos narrados parecen ficción. Fue una historia vivida hace una década que adquiere relevancia por lo que reporta el periodista de Matamoros, Julio Manuel Loya Guzmán y se replica en varios portales incluso nacionales, de que los asesinos de los dos norteamericanos actuaron por cuenta propia. No fueron miembros del Cártel del Golfo.
El reporte de Loya Guzmán dice que los delincuentes fueron detenidos en Calle Primera y Lauro Villar de la colonia Modelo, justo donde se registró la balacera y el secuestro el pasado 3 de marzo.
Los cinco criminales tenían colgado el mensaje: «Cartel del Golfo grupo Scorpión reprueba enérgicamente los hechos del viernes 3 de marzo pasado en donde desafortunadamente falleció una persona inocente madre trabajadora y fueron secuestrados cuatro ciudadanos americanos, de los cuales dos fallecieron y por ello hemos decidido entregar a los responsables directos en los hechos, quienes en todo momento actuaron bajo su propia, determinación e indisciplina, en contra de las reglas que el C. D. G…”
En el mismo mensaje aseguran que han respetado la vida y la integridad de los inocentes, por lo se disculpan con los matamorenses, los deudos de la señora que pasaba por ahí y con los americanos afectados. Adiciona el mensaje “…El C.D.G pide a la sociedad esté tranquila, porque estamos comprometidos para que esos errores causados por indisciplina no se repitan y se castigue a los responsables sean quien sean».
Adicional a lo anterior, trascendió que los dos estadounidenses muertos y el herido, tienen antecedentes delictivos relacionados con drogas, por lo que se descarta la idea de que fueron secuestrados para pedir rescate y cobra vigor la teoría de que su llegada a nuestro país era con otra intención muy diferente a la cirugía estética de la dama.
En la tierra de las Cotorras, Cd. Victoria, sorprendieron las declaraciones del Alcalde, Eduardo Abraham Gattás Báez en relación a su futuro político y hasta fue clara su pretensión a la reelección.
El periodista Alejandro Paz, publicó en su portal que en un “…evento en las instalaciones del Sistema para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF) el edil reconoció el apoyo de los empresarios y mencionó que ellos lo estimulan… pueblo y gobierno, por lo que dijo estar listo para continuar.”
Gattás Báez aseguró de que su gobierno ha hecho mucho “…y es mucho lo que queda por hacer los próximos años, yo estoy listo… y seguimos trabajando para generar las mejores condiciones de seguridad para el libre ejercicio de la actividad comercial y empresarial como la que ustedes realizan”.
De verdad que, Eduardo Gattás estará enfermo o de plano ignora los daños provocados por su ¿política? en temas cotidianos como la recolección de basura, la dotación de agua potable, la limpieza pública, vialidades, alumbrado, seguridad, pavimentación, etc.
No cierro los ojos cuando veo que algunas calles de cierto sector ya están pavimentadas, pero solo unas cuantas y la pregunta obligada es ¿Quién vivirá por aquí que ya le pavimentaron su calle?