Luego del sismo del 2017, se determinó realizar trabajos de restauración de daños de la estructura ocasionados por el terremoto, y en el 2018 comenzaron a trabajar en el lugar.

Después de casi tres años de trabajos de reconstrucción y mantenimiento del Ángel de la Independencia, técnicos comenzaron a desmontar el andamiaje de más de 40 metros de altura que estuvo plasmado en el lugar desde que se iniciaron los trabajos.

Se planea que el monumento quede listo para septiembre, durante la celebración de los 200 años de la consumación de la independencia de México.

En la fase final de los trabajos en «El Ángel», los expertos se dedican a retirar las pintas realizadas por colectivos feministas, pulido de pisos, reparación de las luminarias y limpieza en general.

Pese a que los andamios fueron retirados, vallas metálicas resguardan la glorieta y permanecen instaladas, siendo restringido el paso por elementos de Seguridad Pública.