El abogado Marc Fernich dijo ante una junta de tres jueces de la corte de apelaciones del Segundo Circuito que el juicio a Guzmán no fue justo porque el confinamiento al que fue sometido antes del juicio le impidió trabajar de forma efectiva con sus abogados en la preparación de su defensa.

Nos acorralaron en el juicio para defender a un cliente como el mío, su caso puede sentar un precedente para el próximo Chapo, este hombre es inocente”, comenzó argumentando Fernich.

Fernich también dijo que debería investigarse supuesta conducta inapropiada por parte de los miembros del jurado.

Un miembro del jurado le dijo a un periodista de forma anónima en febrero de 2019 que los miembros del jurado leyeron reportes en los medios de comunicación sobre el caso mientras el juicio ocurría.

El juez les había pedido que no hicieran eso, así que Fernich dijo el lunes que los miembros del jurado infringieron las órdenes del juez.

“Las declaraciones que hizo el jurado crea una nube de incertidumbre sobre si mi cliente recibió un juicio justo, no hubo respeto a la declaración juramentada del jurada, leían todo en la prensa sobre el juicio”, declaró.

Guzmán, exlíder del Cártel de Sinaloa, fue declarado culpable de asociación delictiva para traficar drogas al final del juicio. Gozaba de una fama casi mítica tras fugarse de la cárcel dos veces en México, la segunda mediante un túnel abierto en el baño de su celda. Fue recapturado, extraditado a Estados Unidos en 2017 y sometido a confinamiento solitario.

Sus abogados aseguran que muchas de las pruebas presentadas en el juicio son inválidas. Algunos de los reportes periodísticos que miembros del jurado supuestamente leyeron, dicen los abogados de Guzmán, son sobre denuncias de abusos sexuales por parte de Guzmán que fueron excluidas del juicio.

El juez Brian Cogan, que presidió el juicio, decidió que la evidencia sobre miembros del jurado leyendo reportes de los medios no era suficiente como para cancelar el proceso judicial.

En el juicio, los abogados de Guzmán argumentaron que sirvió de chivo expiatorio de otros narcos que supieron sobornar a políticos y jefes policiales mexicanos para que los protegieran.

Según la apelación, “el enjuiciamiento de Chapo Guzmán se vio alterado por excesos y extralimitaciones tanto gubernamentales como judiciales, recursos innecesarios si él fuera realmente un capo de capos como insistían sus adversarios”.

“Fue cruel e inhumano su encarcelamiento en el Centro Correccional Metropolitano de Nueva York, antes y durante el juicio, le causó deterioro mental y físico”, reiteró Fernich ante los jueces.

Los abogados de Guzmán están pidiendo un nuevo juicio para “El Chapo”. La junta de jueces de la corte de apelaciones no emitió ninguna decisión el lunes.