CDMX.- El Gobierno de Estados Unidos reveló que formó parte del grupo de inteligencia que arrestó a Ovidio Guzmán López, «El Ratón», y que desató una reacción violenta del Cártel de Sinaloa forzando su eventual liberación.
En la primera evaluación pública estadounidense sobre el llamado «Culiacanazo», la Oficina de Aduanas y Control de Aduanas de EU (ICE), aseguró que su participación en la captura de «El Ratón» en 2019 ocurrió a través de una agencia conocida como la Oficina de Investigaciones de Seguridad Interna (HSI) y que colaboró con el Ejército mexicano en el marco de una operación denominada como Operación Paisano.
«La Operación Paisano llevó al arresto de Ovidio Guzmán López en Culiacán. En octubre de 2019 por parte de autoridades mexicanas que trabajaron junto con la oficina de HSI en México», dijo Patrick J. Lechleitner, el director interino de ICE en una carta enviada a investigadores del Senado de EU el pasado 9 de agosto.
Aunque una fuente anónima aseguró al sitio de noticias Vice en enero de 2023 que la HSI había participado en la fallida captura de Guzmán López, la declaración de Lechleitner es la primera confirmación oficial sobre que el Gobierno estadounidense participó en el operativo, algo que el Gobierno de México no reveló.
«Después de su arresto, los hermanos de Ovidio organizaron ataques coordinados con pistoleros del Cártel contra el Ejército mexicano para obligar al Gobierno mexicano a liberarlo, un evento de alto perfil conocido como la ‘Batalla de Culiacán’ o ‘El Culiacanazo’, que resultó en al menos 12 muertes», resumió Lechleitner
Al igual que otras agencias estadounidenses como el Buró Federal de Investigaciones (FBI) y la Administración para el Control de Drogas (DEA) que cuentan con oficinas en territorio mexicano, la HSI tiene agentes distribuidos en la Embajada estadounidense en la Ciudad de México y otros 6 consulados.
Por otra parte, el Gobierno de Estados Unidos aseguró que la decisión del Presidente Andrés Manuel López Obrador de liberar a Guzmán López, tras la batalla entre el Ejército mexicano y el Cártel de Sinaloa del 17 de octubre de 2019 en Culiacán elevó a la red de «Los Chapitos» como un cártel de alto nivel.
«El Presidente mexicano Andrés Manuel López Obrador ordenó la liberación de Ovidio ese mismo día. Esto envalentonó a ‘Los Chapitos’ y los elevó como narcotraficantes de alto nivel y como líderes de un cártel que podía ejercer influencia significativa en la actividad criminal en EU y México», acotó Lechleitner.
«Esto también aumentó la popularidad de ‘Los Chapitos’ entre los narcotraficantes más jóvenes y la criminalidad organizada en todo Sinaloa, desestabilizando aún más la región».
En junio de 2020, el Presidente Andrés Manuel López Obrador reconoció que la decisión de liberar a Ovidio Guzmán López fue tomada por él mismo tras la batalla en Culiacán de 2019; eventualmente, fue arrestado por segunda ocasión en enero de 2023 y desde entonces permanece en custodia.
Desde septiembre de 2019, el Gobierno estadounidense comunicó a México una solicitud de extradición de Guzmán López por delitos de narcotráfico y tras la cual ocurrió el fallido primer operativo en Culiacán; este febrero, EU renovó la solicitud de extradición después de la nueva captura.
En estos asuntos se acusa a Ovidio y sus medios hermanos Iván Archivaldo y Jesús Alfredo Guzmán Salazar de vender 80 kilos de fentanilo mensuales en el área de Los Ángeles, California, a un precio de 30 mil dólares cada uno, entre 2017 y 2022.
También, de usar empresas de transporte para distribuir la droga a Ohio, Michigan, Minnesota, Nueva York y Massachusetts.
Además de algunos informantes, las acusaciones se sustentan en ex socios convertidos en testigos colaboradores como Dámaso López Núñez «El Licenciado» y su hijo Dámaso López Serrano «El Mini Lic», operadores del Cártel de Sinaloa.
Ambos revelaron ante la justicia estadounidense operaciones de la organización criminal y la implicación de «El Ratón» en secuestros, torturas y tráfico de drogas.