CDMX.- Dean, Wes y JT son tres niños tan vagos e inquietos que sus travesuras se salen de control, como provocar un incendio casi trágico en el que los bomberos tienen que intervenir. Lejos de enfrentar su responsabilidad, culpan a uno de sus mejores amigos, Ricky Stanicky.
Y aunque Stanicky es «el culpable de todas sus fechorías», su existencia sigue siendo un misterio para cada una de sus familias: Escuchan de él, saben sobre él, pero recuerdan haberlo visto en ningún lugar.
La película Ricky Stanicky, que llega este jueves a Prime Video, sigue a esta tercia (Zac Efron como Dean, Jermaine Fowler como Wes y Andrew Santino como JT) ya mayor, pero que aún cometen sus maldades y mentiras.
Esta mini pandilla de cuates le ha hecho creer a sus respectivas parejas que Ricky es el alma de las fiestas, el galán rompecorazones, todo un activista y filántropo, que es el sueño de toda madre para alguna de sus hijas y que además de tener un físico portentoso y saludable, su grado de inteligencia es superior al promedio: es ingenioso, creativo y, sobre todo, sincero y simpático. O sea, el casanova inalcanzable. O el galán que todas desean.
«Fue interesante descubrir en la historia cómo ser un personaje ficticio, y aunque no quiero revelar mucho, sí que es divertido e inteligente lo que sucedió con él y el desarrollarlo me parece que le dio mucha originalidad», comentó John Cena.
Un buen día, los amigos se van de juerga a Atlantic City y lo que viven en un casino se les sale de las manos. Uno regresa muy tarde para atestiguar el nacimiento de su hijo, y los otros dos se meten en problemas con sus respectivas parejas, ¿a quién culpan? A Ricky.
Casualmente en ese viaje de fiesta, Dean conoce a Rod (John Cena) y al recordarlo le propone que se vuelva su «amigo imaginario», pero ya de carne y hueso, y con sueldo pagado, ya que es actor.
Como es un histrión fracasado que no convence con sus interpretaciones y parodias de Billy Idol, Alice Cooper, Devo y hasta Britney Spears, acepta el desafío y antes de presentarse ante el círculo familiar de los tres, debe leer una «biblia» de vagancias para que sepa de qué hablan.
«Son tres amigos que se muestran un tremendo respeto, un profundo y agudo sentimiento y ahí están. Se meten en una mentira y se comprometen con ella, viven aventuras, se conocen; tienen una mente muy elaborada y en algún momento conocen a un chico que», y ahí cortó la introducción Efron, porque pensó que daría spoiler.
Entonces, Ricky llega a una gran fiesta familiar donde todo parece ir en contra, como que una de las suegras de ellos intenta desenmascararlo, y saliendo airoso de todo, se topa con que el jefe de Dean y JT, Ted Summerhayes (William H. Macy) toma una decisión que les cambia la jugada y los arruina por completo.
Madura su historia con el tiempo
Hacer las cosas a su propio ritmo y sin expectativas son dos características que el director Peter Farrelly ha llevado al pie de la letra en sus proyectos fílmicos, como ocurrió en Ricky Stanicky.
«Como todos mis proyectos, estuvo mucho tiempo en mí, como unos 15 años ahí pendiente y casualmente los que he hecho así son, han necesitado tiempo. Una Pareja de Idiotas (Dumb and Dumber) tomó como cinco años hacerla, Loco por Mary (There’s Something About Mary) como 10.
«Creo que el tiempo los hace mejores y crecer, nunca estoy pensando ‘a este le va bien, o este gana premios’. Lo que hago es confiar, y así se hacen los filmes, lo mismo sucedió con Green Book, Una Amistad Sin Fronteras», dijo Farrelly en conferencia virtual.