Madero, Tamaulipas.- Luego de recolectar vestigios del colapso del techo de la iglesia de la Santa Cruz, suscitado hace una semana y que dejó 12 personas muertas y 60 lesionadas, personal y peritos de la FGJT analizan restos del muro y la estructura del inmueble, como parte de las investigaciones por el delito de homicidio.
El párroco Pablo Galván, dijo, que en más de una ocasión los agentes de la Fiscalía General de Justicia de Tamaulipas, han visitado el domicilio del templo en la colonia Unidad Nacional en Ciudad Madero.
«Porque yo vi a los de la Fiscalía, los vi que andaban ahí, (recopilaron) muro y las partes donde apoyaba toda la estructura, etcétera», aseveró el padre.
Galván dijo que de acuerdo a la FGJT en dos semanas a más tardar a partir de la fecha en que ocurrió la tragedia, rendirán el primer reporte sobre el hecho.
«Estamos esperando el reporte de la Fiscalía para esta semana que viene, si Dios Quiere y ya entonces a ver que sigue», manifestó.
La FGJT abrió la carpeta de investigación correspondiente número 298/2023 por el delito de homicidio, derivado de la muerte de 12 personas, ocho mujeres y cuatro hombres, entre ellos tres niños.
Asimismo, el pasado miércoles ordenó frenar la demolición del inmueble, que había concluido un día antes.
Al respecto, el sacerdote católico, que ofició la misa dominical minutos antes del derrumbe a las 4:18 horas del pasado 1 de octubre, dijo que a la hora en que se ordenó frenar la demolición del inmueble, ya los habían tumbado, tras una determinación de los integrantes del Comando de Incidentes.
«Se paró precisamente por eso, para no contaminar pruebas», subrayó «pero, ya está casi todo el material que van a examinar ya está en laboratorio».
De la iglesia, dijo que únicamente quedó de pie el altar donde se encuentra la cruz de madera.
Sin embargo, este sábado autoridades acudieron a reforzar el nicho, debido a los fuertes vientos.
«No se cayó, pero, con toda la vibración de máquinas y eso sí se empezó a fracturar, se empezó a cuartear», apuntó.
«Si pasas ahorita está apuntalado y hoy en la mañana vinieron a asegurarlo para prevenir cualquier cosa nada más, pero está en vistas yo creo de demolerlo, porque pues qué caso tiene», añadió.
A una semana de la tragedia, relató que la comunidad religiosa aún se encuentra consternada, luego de que nadie se explica el colapso.
«Ahorita estamos sobre todo muy consternados por las víctimas y sus familias, todavía hay gente en el hospital, entonces estamos pendientes de cómo evolucionan y tratar de acompañar a las familias porque pues fue algo tan repentino y tan doloroso», reiteró.