El drama del agua se asoma otra vez en Nuevo León.

La falta de lluvias, la caída en los niveles de mantos subterráneos y de presas, y el retraso en la incorporación de pozos profundos, que además hasta ahora no tienen los volúmenes esperados, ofrecen un panorama crítico.

LA FALTA DE LLUVIAS

En el 2022, la sequía provocó que las presas Cerro Prieto y La Boca terminaran por casi secarse, originando cortes en el servicio del 22 marzo al 14 de septiembre.

Agua y Drenaje concluyó con esos cortes el año pasado tras lluvias en las primeras dos semanas de septiembre, que elevaron el nivel de La Boca a un 80 por ciento y de Cerro Prieto a un 19 por ciento, y recargaron acuíferos.

Sin embargo, a partir de ahí cesaron las lluvias y así se prevén los primeros tres meses de este año.

LAS PRESAS Y MANTOS SUBTERRÁNEOS

Aunque las presas La Boca y Cerro Prieto tienen mejores niveles que en 2022, han empezado de nuevo a descender, y extracción en la segunda es mayor a lo estimado.

Con un nivel del 62 por ciento, un 18 por ciento menos que lo llegó a tener tras las lluvias de septiembre, en La Boca han empezado de nuevo a formarse islas.

En Cerro Prieto, tras mantenerse varias semanas en un 19 por ciento, ya registra un 16.8 por ciento.

En lo que va de enero, a Cerro Prieto le han extraído 3 mil 150 litros por segundo, más del doble de los mil 500 litros por segundo que recomendó la Conagua.

De seguir esa extracción, la dependencia federal aseguró que para marzo o abril dejará de llegar de nuevo el agua a la toma de la presa y tendrían que aplicar el plan de bombeo emergente, como el año pasado.

En el caso de El Cuchillo, aunque con el trasvase reciente a Tamaulipas se le quitaron 200 millones de metros cúbicos, su nivel del 48 por ciento le permite seguir aportando 5 mil litros por segundo.

Los acuíferos, que son las fuentes subterráneas, también han bajado sus niveles por la falta de lluvias, reconoció AyD.

RETRASO EN POZOS PROFUNDOS

La incorporación de 29 pozos profundos es una apuesta importante para incorporar agua a la red, pero su inicio ya tiene un retraso de dos meses.

Agua y Drenaje informó que será durante febrero cuando empiecen a sumar los primeros pozos, pero han detectado que los cuatro que han aforado no tienen los volúmenes de agua esperados.

«Por eso necesitamos que la gente nos ayude, que haga su parte reduciendo su consumo», dijo el titular de AyD.

Con los 29 pozos profundos, originalmente AyD esperaba incorporar de 2 mil a 3 mil litros por segundo, pero esto ha cambiado.

NUEVAS FUENTES DE ABASTO

Si se cumple el plazo oficial, en julio se incorporará el segundo acueducto de la Presa El Cuchillo, con el que se podría aumentar de 5 mil a 10 mil litros por segundo la extracción.

La Presa Libertad, que será terminada en diciembre, depende de las lluvias en esa cuenca.