CDMX, México.- Con la expectativa de un primer trimestre del año seco, con lluvias por debajo del promedio histórico, Agua y Drenaje sostuvo ayer que el abasto de la zona metropolitana está garantizado… al menos hasta junio, al arranque del verano.

Al reactivar ayer las conferencias de prensa sobre la disponibilidad de agua, Juan Ignacio Barragán, director del organismo, señaló que en general las presas están en mejor nivel que a principios del 2022, pero los mantos acuíferos están aportando menos.

El funcionario admitió que esta caída no es sólo porque desde diciembre han vuelto a escasear las lluvias, sino por la habilitación de nuevos pozos que se intensificó durante la crisis hídrica del verano pasado.

Expuso que los volúmenes acumulados en las presas son suficientes, pero las lluvias son necesarias para recargar los acuíferos.

Actualmente, dijo, se extraen unos 9 mil litros por segundo a las presas El Cuchillo, Cerro Prieto y La Boca, pero la Ciudad consume alrededor de 14 mil litros en esta época del año, y en verano suele aumentar hasta 16 mil litros.

«Queremos evitar una crisis, y por eso estamos tomando medidas responsables», señaló sobre el programa de reducción de presiones en horarios de bajo consumo.

«Sí se descarta de aquí al verano», señaló, «que apliquemos cualquier programa (de racionalización del servicio), más allá de la reducción de presiones que se está aplicando ya y se va a aplicar en toda la zona metropolitana en horarios de baja demanda».

Barragán indicó que con esta modulación pretenden evitar el desabasto que el año pasado sufrieron principalmente habitantes de zonas altas de la Ciudad, como el sector Cumbres.

«(Al) reducir la presión en horarios de bajo consumo, logramos que llegue agua a las zonas más altas», dijo.

«(La medida) tiene algunos aspectos que pueden molestar, (como que) en horarios de baja presión sale una cantidad menor, pero agua hay».

A pregunta expresa, Barragán dijo que es difícil garantizar que no habrá desabasto en zonas de mayor altitud, pero confió en que se puede lograr.

El director de AyD destacó que las presas Cerro Prieto y La Boca que el año pasado se secaron tienen hoy 76 por ciento y 86 por ciento más agua que en el mismo periodo que el año pasado, mientras que El Cuchillo registra un 11.7 por ciento menos, luego del trasvase a Tamaulipas.

Sin embargo, aseguró que el agua disponible en esta última presa alcanzaría para dos años, según el volumen de extracción habitual, y aún considerando el segundo acueducto en construcción que se estima tener listo para el verano.