Nuevo Laredo, Tamaulipas.- Miles de paisanos que en los últimos días han estado retornando a Estados Unidos luego de pasar las fiestas decembrinas con familiares en diversos estados de la República están saturando los puentes internacionales en Tamaulipas.
En el puente internacional Juárez-Lincoln, los connacionales que regresan por Laredo, Texas, tardan en promedio de cuatro a cinco horas, lo que ha ocasionado largas filas.
Este cruce –también llamado Laredo Dos– luce saturado desde la tarde noche del lunes, ya que es el único puente internacional abierto para cruzar a Laredo, Texas desde el centro de Nuevo Laredo.
El Puente Laredo Uno está cerrado por remodelación.
Otro de los cruces, el puente Comercio Mundial o Puente III, es poco usado por conductores de vehículos ligeros por la inseguridad y por estar muy alejado de la ciudad.
La ciudad fronteriza de Nuevo Laredo es la principal puerta de acceso de Estados Unidos, y es por donde cruza el 75 por ciento de los paisanos en Tamaulipas.
Ante la aglomeración de paisanos, el Gobierno municipal exhortó a conductores locales a evadir el tráfico.
«Por el momento las filas de nuestros paisanos se extienden hasta el puente Madero, recuerda que están emprendiendo el viaje de regreso a sus hogares. Si piensas cruzar a Laredo, Texas, asegúrate de hacerlo por el carril exclusivo para fronterizos», recomendó el Gobierno local en su página oficial de Facebook.
En Reynosa, las filas fueron menos prolongadas. El promedio de tiempo en cruzar las casetas de la Aduana de Hidalgo, Texas, fueron de 40 a 60 minutos, mientras que en el puente Anzaldúas se tardaban entre 60 a 80 minutos.
