CDMX.- La Guardia Nacional en un principio informó que abrieron fuego debido a que el conductor de la camioneta los amenazó con un arma y por ello dispararon, según ellos, a las llantas del vehículo.
El testimonio del sobreviviente contradecía por completo a la versión de los militares.
La autopsia que se le realizó a la menor de edad señaló que “perdió la vida a consecuencia de las alteraciones en los pulmones, médula espinal e hígado debido a dos heridas por proyectiles de arma de fuego penetrantes con orificio de entrada en hemitórax posterior”.
La menor al momento de su asesinato contaba con 2 meses de embarazo, la CNDH indicó en su comunicado que estas acciones consistieron en “uso ilegal y excesivo de la fuerza letal, que vulneró el derecho humano a la vida, a la integridad, a la seguridad personal y legalidad, de las dos víctimas de la agresión”.
La misma Comisión indicó que “el uso de la fuerza no fue gradual, ni se intentó reducir al mínimo los daños, y no se advirtió que hayan intentado realizar maniobras menos letales, ni pudieron acreditar que el uso de las armas haya sido estrictamente inevitable”.
El comunicado íntegro puede leerse a través de la cuenta de Twitter de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos.